Mañana obtendrá su merecido descanso un compañero, por fin ese ansiado momento, la última mañana que sonará el despertador (a menos que él quiera). Se jubila.
Como siempre que se jubila un compañero de la profesión docente, lo primero que pienso es... la de personas que habrán pasado por sus aulas. Muchas veces escuchamos que el futuro de la sociedad está en nuestras aulas ahora, que de nuestras enseñanzas se forjan las personas adultas que llevarán las riendas mañana. Pero con este compañero podemos decir que sus enseñanzas de hoy preparan a esas personas del mañana, pero las del pasado forjaron a los adultos de hoy. Gran parte de la sociedad de hoy en día de la región es reflejo de sus aulas. Porque 38 años dedicados a la docencia dan para mucho.
Es muy querido en la zona, como docente de un colegio gran parte de su carrera profesional y de un instituto en el último tramo de esta. Ha vivido, seguro, muchas cosas: reformas educativas, la llegada de la atención a la diversidad, gratuidad de libros de texto, la implantación de Rayuela y la de las TIC, los famosos portátiles de los alumnos, más cambios legislativos,...
Cambios a los que no sólo ha ido adaptándose y de los que ha aprovechado lo mejor de cada uno de ellos, sino que (según oigo a compañeros y antiguos alumnos) siempre ha sido inmejorable en su trato humano y con respeto a todos esos hombrecitos.
Es un maestro de los de toda la vida, que en su plenitud docente, cuando aún tiene mucho que enseñarnos se retira. De él he aprendido, en los pocos meses que he tenido la suerte de compartir como compañero suyo, muchas cosas:
- Cómo afrontar momentos difíciles para todos, haciéndoselo más fácil a los alumnos
- Cómo disfrutar con ellos de las clases y de sus vidas
- Estrategias metodológicas innovadoras para poner los contenidos al alcance de aquellos que tienen alguna dificultad
- A sonreír todas las mañanas y tener unas palabras amables para todos los compañeros
- Mucho de educación en Extremadura y del porqué de las cosas de hoy día
- Cómo hacer que los alumnos sean mejores personas
- A ser más humilde
Sólo lamento no poder compartir más tiempo con él, pues tendrá su más que merecida jubilación. Y aún en estos últimos días que cualquiera estaría pensando más en el tiempo libre que va a tener y que por fin se jubila; él tiene tiempo para despedirse a lo grande de todos sus compañeros, con una sonrisa, humildad y una imagen como ésta.
Sólo me queda,
Juan, agradecerte tu trabajo de todos estos años, que seguro que ha servido para mejorar ésta, nuestra Extremadura, y todo lo que he podido aprender de ti estos meses compartidos sin que, desde la humildad que te caracteriza, pretendieras enseñarme nada mientras compartías tus experiencias.
Mañana se jubila un maestro de los de antes, de los que ya no quedan. A disfrutarlo. Perdemos uno de los grandes, pero el mundo ganará más tiempo de un artista.
¡¡Aunque maestro se es para toda la vida!!
